Sales de baño como se usan

Después de un largo día de trabajo, no hay nada como un buen y merecido baño, y qué mejor que disfrutarlo con un poco de sales de baño relajantes.

Además de ayudarnos a pasar un momento increíble, son muchos los beneficios que aportan a nuestra salud. En Aquadis te contamos por qué deberías comenzar a usarlas y cómo sacarles el máximo provecho.

Descubre cómo preparar un buen baño de sal tanto en tu bañera como en tu ducha y cómo puedes hacer tu propia sal casera con ingredientes fáciles de conseguir. ¿Estás listo? ¡Entonces toma nota y comencemos!

Sales de baño para qué sirven

Las sales poseen una gran cantidad de componentes naturales que ofrecen muchas bondades a nuestro cuerpo tanto a nivel físico como emocional.

Es común emplearlas principalmente para gozar de un delicioso momento relajante, sin embargo, su utilidad va más allá de eso.

Sirven tanto en el cuidado de la piel y en la relajación muscular para los amantes del deporte, como en el tratamiento de diversos padecimientos y en la mejora de la salud en general.

Sales de baño naturales

Existen varios tipos de sal de baño categorizados de acuerdo a su origen y forma de extracción. Entre las más populares se encuentran las siguientes:

  • Sal de roca: Este tipo de sal se extrae de depósitos subterráneos en forma de rocas de gran tamaño que después son trituradas en pedazos más pequeños.
  • Sal del Himalaya: Esta sal se extrae de la halita. Contiene una gran cantidad de minerales como calcio, magnesio, zinc y cromo.
  • Sal Andina: También conocida como sal de Maras, se extrae del agua salada de las altas montañas. Es rica en calcio, magnesio, cobre, zinc, entre otros elementos.
  • Sal marina: Como su nombre lo indica, se extrae del agua de mar. A diferencia de la sal común, esta posee una mayor cantidad de oligoelementos y minerales.

Gracias a sus componentes, las sales de baño son excelentes para nuestra salud. Enseguida veremos cuáles son las bondades que se obtienen tras disfrutar de un delicioso baño de sal.

Sales de baño beneficios

Efecto desintoxicante

Las propiedades de la sal y el agua caliente favorecen la desintoxicación. Gracias a que los poros de la piel se abren, las toxinas y metales pesados presentes en el cuerpo son eliminados.

Alivio muscular

Ayudan a la relajación de los músculos, contribuyendo a su desinflamación y a reducir la tensión acumulada.

Cuidado de la piel

Las sales contribuyen a combatir y evitar todo tipo de irritaciones y problemas en la piel causadas por hongos e infecciones.

También nos ayudan a combatir los problemas de acné y puntos negros gracias a la eliminación de las toxinas en la piel que causan la obstrucción de los poros. Esto sin mencionar los beneficios en cuanto a suavidad y elasticidad.

Desinflamación de articulaciones

Un buen baño con sales y agua caliente contribuyen al alivio del dolor articular. Es ideal para personas que sufren de artritis o alguna otra enfermedad que causa dolor en estas zonas del cuerpo.

Sales de baño uso

Gozar de todos los beneficios que aportan estas sales es muy fácil. Lo único que tienes que hacer es llenar tu bañera con agua caliente, agregar la proporción señalada en el recipiente y esperar a que se disuelva.

Hecho esto, solo resta disfrutar de un buen momento de relajación. Puedes quedarte dentro del agua todo el tiempo que quieras, sin embargo, nada más necesitarás de 10 minutos para aprovechar todas las propiedades de la sal.

Para endulzar el ambiente, puedes encender algunas velas y poner música de tu gusto, leer un buen libro o practicar un poco de meditación.

Puedes gozar de un buen baño con sales entre 2 y 3 veces a la semana sin ningún problema. Pero antes, asegúrate de no sufrir complicaciones de salud que te lo impidan.

Por ejemplo, si tienes problemas de presión arterial baja, el contacto de tu piel con magnesio y agua caliente ocasionará que tu presión disminuya aún más.

Cómo usar sales de baño en regadera

Si no tienes bañera en tu hogar, aún puedes gozar de las bondades de estas sales con ayuda de tu ducha. A continuación, te mostramos un par de alternativas para hacerlo.

  • Tratamiento exfoliante: Una vez hayas terminado de ducharte, toma un poco de sal de baño y utilízala para exfoliar tu cuerpo. Espera unos cinco minutos y después, enjuaga con agua tibia. Puedes combinar tu sal con un poco de aceite de almendra para una mejor exfoliación.
  • Baño de pies: En un recipiente o tina hidromasaje, agrega sal de baño de tu preferencia y remoja tus pies durante diez minutos. Transcurrido este tiempo, sácalos del agua, sécalos y ponles un poco de crema humectante para dejar mucho mejor la piel de tus pies.

Donde comprar sales de baño

Gracias a su creciente demanda, las sales de baño son cada vez más fáciles de encontrar. Podemos adquirirlas en tiendas dedicadas a productos de belleza y cuidado personal en diferentes presentaciones y aromas.

El precio de estas sales varía de acuerdo al lugar donde se consigan. Sin embargo, por los beneficios a la salud que aportan, vale la pena adquirirlas.

Sales de baño comprar

Cómo hacer sales de baño

Si en tu hogar no cuentas con sal de baño y te es complicado adquirirlo en tu ciudad, ¡no hay problema!, puedes hacerla tú mismo. Con ingredientes fáciles de conseguir, podrás preparar tu propia sal casera. Para ello, necesitarás:

  • Sal: No hay problema si utilizas sal del Himalaya, marina o la de tu preferencia. Sin embargo, asegúrate de que sea natural, libre de aditivos o de algún otro componente químico industrial.
  • Aceite esencial: Estos le aportarán un delicioso aroma a tu sal de baño casera, además de otras propiedades beneficiosas para tu salud.
  • Colorante hidrosoluble natural: Aunque no es un ingrediente obligatorio, puede ayudarte a darle un poco de color y decoración a tu sal.
  • Hierbas: Otro ingrediente opcional. Puedes agregar unas cuantas hierbas aromáticas como manzanilla o eucalipto.

Teniendo lo anterior a la mano, es momento de comenzar a preparar la sal. Para ello, debes hacer lo siguiente:

  1. Dentro de un frasco o contenedor de plástico, agrega dos tazas de sal.
  2. Añade unas cuantas gotitas (5 aprox.) de aceite esencial. Si tienes dudas sobre la cantidad correcta que debes agregar, puedes consultar a un profesional de la salud.
  3. Debido a su naturaleza liposoluble, un aceite esencial no se disuelve en el agua. Por lo que, en agua caliente, puede terminar flotando y provocar quemaduras al entrar en contacto con la piel. Para prevenir esto, usa un poco de champú o gel de baño para disolverlo.
  4. Agrega el colorante hidrosoluble y las hierbas.
  5. Mezcla hasta disolver muy bien la sal con el aceite esencial y el resto de ingredientes.
  6. Pon tu sal casera recién hecha dentro de un recipiente hermético para conservarla y tenerla listo para tu próximo baño.

Sales de baño y espuma

Un buen baño relajante y revitalizante no solo depende de la sal; la espuma también juega un papel importante. No hay ningún problema si mezclamos sal de baño y espuma, ya que ambas cosas se complementan de forma perfecta.

Solo necesitamos un poco de jabón especial y, si te gusta, con un poco de aroma para mejorar aún más el momento. Recuerda tener cuidado de no generar espuma en exceso, puesto que después de terminar tu baño, es un poco complicado quitarla.

Sales de baño espuma

¿Quieres disfrutar de tus sales de baño en el lugar perfecto? ¡Nosotros te ayudamos!

Aquadis es una empresa especializada en la venta de productos para baño, desde mamparas hasta platos de ducha de la más alta calidad.

Tenemos más de 16 años trabajando con los mejores proveedores del mercado y ofreciendo a nuestros clientes la mejor atención y servicio.

Te invitamos a visitar nuestra tienda online y conozcas el amplio catálogo de productos que tenemos a tu disposición. Ante cualquier pregunta que tengas, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través de la página de formulario.

Disfruta de las sales de baño en el lugar de tus sueños con Aquadis, los expertos en hacerlo realidad.